Una vez tu móvil ha caído al agua o se ha mojado, el peligro reside en los cortocircuitos y la corrosión.
Suponiendo que lo has sacado del agua lo más rápido posible…
- Evita la tentación… NO LO ENCIENDAS!! Si tu móvil se ha apagado al mojarse, no intentes encenderlo ni tocar teclas, puede provocar un cortocircuito y que algún componente se funda, y va a ser peor. Si sigue encendido, apágalo.
- Extrae todas las piezas que puedas: si puedes, quítale la batería, la tarjeta SIM y la SD.
- Seca el móvil con mucho cuidado con papel absorbente y con especial cuidado para que las gotas de agua que haya internas no se extiendan. Comprueba si hay gotas en la ranura de tarjetas, el puerto de carga y de auriculares.
- Otra opción, aunque es delicada pero puedes probar con mucho cuidado, pásale la aspiradora para que absorba las gotas de agua. NUNCA un secador, pues puede expandir las gotas de agua y podría ser peor el remedio que la enfermedad, te puedes cargar los componentes electrónicos. De hecho, la electrónica funciona mejor cuanto más fríos están los circuitos. Tampoco lo pongas en el radiador ni al sol, de hecho, si estás pensando en que el agua se evaporará, solo lo haría a 100 grados!
- El famoso arroz. Absorbe muy bien la humedad y por probar que no quede. Puedes tenerlo durante 24-48 horas, y ¡paciencia! Ten en cuenta que esto no es milagroso, pero merece la pena antes que arriesgar el móvil. Esperar puede ser clave.
- Otros materiales desecantes que puedes utilizar son: la arena para gatos y las bolsas de gel de sílice (las típicas que vienen en las bolsas con la ropa y calzado), copos de avena, esponjas y toallas de algodón.
También debemos de tener en cuenta a dónde ha caído, porque si se te ha caído en la playa, el agua salada es un problema y la corrosión es prácticamente inmediata. En este caso actuaremos de la siguiente forma:
- Sécalo todo lo que puedas con papel absorbente si lo tienes a mano. Una vez seco, puede que te suene raro, pero se recomienda meterlo en agua destilada (el agua que se utiliza para planchar o para limpiar la batería de los coches). Usa un recipiente y remueve bien para quitar toda la sal que pueda haber en su interior. Si no tenemos agua destilada, también se puede utilizar alcohol isopropílico de 99 grados.
Volvemos a secar y recuerda, nada de secador. Envuélvelo en servilletas y mételo en una bolsa de plástico para congelar. Si tenemos un deshumidificador, úsalo para quitarle la humedad hasta que quede totalmente seco, entonces podremos probar a ver si funciona de nuevo.
Móviles sumergibles:
Que un móvil sea sumergible a veces no es que lo sean, puesto que el sellaje se deteriora y el agua daña cualquier dispositivo eléctrico.
- Solo si todos los conectores están bien sellados son sumergibles.
- Las pruebas se limitan al agua potable, pero el agua de mar es más dañina y los resultados pueden variar.
¿Las garantías cubren los móviles mojados?
Bueno… Tenemos una mala noticia, el servicio técnico no las cubre o puede que el presupuesto de reparación sea bastante alto. La garantía no suele cubrir los daños por agua, ni siquiera para los móviles sumergibles.
Además, los móviles tienen un “chivato”, un mecanismo que suele ser una pegatina que cambia de color cuando le toca el agua, por lo que si la pegatina cambia de color no hay garantía que valga. Peeero, si eres precavido o tienes una mala experiencia previa con los móviles, quizá te puede quitar el susto si previamente has contratado un seguro.
Si estás leyendo esto porque tu móvil se ha caído al agua… ¡Mucha suerte!